En este momento estás viendo Reflexión 4: Sembradores de PAZ y AMOR

Reflexión 4: Sembradores de PAZ y AMOR

En abril del 2023, Claudia, con 20 años, dejó una carta escrita que encontraron tras suicidarse. Durante años tuvo que sufrir insultos y desprecios, e incluso sus acosadores crearon un grupo de WhatsApp con su cara y el cuerpo de una rata. En la carta decía entre otras cosas: «Queridos acosadores, dais asco, espero que carguéis con una muerte en la conciencia».

Dicen algunos estudios que las chicas son las más perjudicadas preferentemente por internet con el ciberbullying y vía WhatsApp o TikTok en primaria o Instagram en secundaria… ¡cuánto daño están haciendo los móviles!.

¿Nos enfrentamos a una nueva generación que ha normalizado la violencia? ¿Son chicos que no han aprendido lo que es el respeto a los demás o la empatía? ¿Están destrozando vidas las RRSS y las tecnologías mal usadas?

Me llama la atención que, entre los rasgos más comunes del abusador, se encuentra que más del 70% de ellos tiene problemas familiares. ¡Qué importante es una familia fuerte y bien estructurada!

Ciertamente es necesario que haya programas educativos, como nos ha explicado Constantí, nuestro invitado de esta tarde, que estén enfocados a sensibilizar a los alumnos para que sean conscientes del daño que puede provocar esto en una persona y para que tengan herramientas para enfrentar el problema y buscar soluciones. Pero también los padres deberíamos de formarnos en estos asuntos, porque lo que está en juego es la vida de nuestros hijos, sea este la víctima o el verdugo.

Necesitamos jóvenes fuertes que amen el Bien y la Bondad, que allá donde estén sean sembradores de paz y amor.

Pero estas futuras generaciones necesitan unos padres que les inculquen buenos valores para que sepan desarrollarlos a su alrededor. Que les preserven de todo aquello que daña su interior, que les dejen ser niños inocentes sin adelantar etapas.

Querido lector, el bullying o acoso escolar es una lacra de nuestra sociedad que muestra el deterioro moral que sufrimos. Sin embargo, no olvidemos que esos niños abusadores, son también ellos mismos las víctimas, muchas veces, de familias destruidas, de padres que no han estado ahí cuando los necesitaban, o han sufrido maltrato y nadie les ha ayudado a remitir ese dolor interior que sienten. Ellos también necesitan recibir ese abrazo inmenso que anhelan y que ante la falta y el dolor que les provoca, responden con violencia hacia sus iguales.

Querido lector, hagamos como dice la letra de la canción de Los Meconios, luchemos juntos por hacer algo, no nos quedemos mirando. El paraíso en la tierra no es posible, pero sí podemos atisbar un diminuto reflejo de lo que será si juntamos todos nuestras manos, para hacer una cadena de amor y paz en este mundo. Si somos héroes y actuamos contra el acoso escolar.

Gracias de parte del equipo de la Asociación ECA a todos los que estáis trabajando por erradicar el acoso escolar y defender a estos niños de ese terrible mal. Seguiremos día a día haciendo brillar la luz del amor y del bien, lo hacemos por ellos, porque… SON NUESTROS HIJOS.

Un saludo y hasta la próxima cita:

Alicia Beatriz Montes Ferrer


Descubre más desde ECA

Suscríbete y recibe las últimas entradas en tu correo electrónico.

Deja una respuesta